Dime porque te digo cientos de razones de porqué me equivoqué
ya no me quedan máscaras ni tacto en esta piel
Eran las luna y media y me dio por ser la luz de tu lámpara, tu cuerpo y tu corsé
Soy polvo de estrellas lo sé
sigo en mi cuarto menguante y a pesar de todo aguanté
la eternidad de tus instantes
y pude parar el reloj cuando no había azahar
y supe callarme cuando quise amar
y pude morder el agua y arrancarme en la arena
del cielo reposando y si te llamaba mar
era porque brotaba tanta energía de tus dedos que tus huellas eran almas y mordían con mis yemas y yo llamaba poesía a cada pena que contabas porque cada pena tuya era la mia
Y yo te decia frena (cada vez que nos gritabamos)
Y yo te decía frena(cada vez que nos matabamos)
Vida mía frena