Fuego final.
Perdido y no lo puedo escuchar.
Los días se escapan,
las nubes se van.
Si alguna vez fui
un rayo y no te supe esperar
maldigo mi suerte,
me quiero matar.
Las victorias nunca pasan por mi lado.
Las promesas y las dudas,
en el mismo trago.
Necesito acertar
aunque sea un rato.
Piel de huracán.
Podemos apostarlo al billar.
Hagamos un trato:
lo dejamos igual.
Si alguna vez fui
un loco que te quiso cambiar
que no se te ocurra
entenderlo mal.
Las victorias nunca pasan por mi lado.
Las estrellas y la bruma,
en el mismo trago.
Necesito acertar
aunque sea un rato.
Ponte en mi lugar
aunque sea un rato.
Mientras, por aquí
llueve a todo trapo, pero
siempre afloja el temporal
aunque sea un rato
aunque sea un rato
aunque sea rato.