Dicen que la vida se decide
en un tablero de ajedrez,
que los sueños son engaños
que al final desaparecen.
Dicen tantas cosas,
que podrían no decirlas y callarse de una vez.
Dicen que se ama de una forma
y que no hay forma de cambiar,
que el amor es solo un juego
y una estúpida ilusión.
Y el estúpido resulta ser aquel
que no ama a nadie de corazón.
Así que intenta caminar,
dibuja libremente el camino
(caminaré, caminaré).
Perdimos tiempo en rebuscar
pedazos de un pasado marchito
(te seguiré, te seguiré).
Vive sin barreras, así que déjate de historias
y ven, acércate,
que te cuente lo que vamos a hacer.
Saca de tu pecho el rencor
y mira bien hacia dónde se dirigen tus pies.
Enséñame tus alas y grita que la vida es bonita
aunque esté del revés.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Dicen que la suerte es caprichosa
y nos dispone el porvenir
y que venga como venga
la tenemos que asumir.
Dicen que tenemos un rejol
que determina lo que nos va a ocurrir.
Dicen que el destino manda siempre
por encima del querer,
y yo te digo que el querer acaba siendo poder.
El poder cambiarlo todo
está en las manos del que quiera hacerlo bien.
Así que intenta caminar,
dibuja libremente el camino
(caminaré, caminaré).
Perdimos tiempo en rebuscar
pedazos de un pasado marchito
(te seguiré, te seguiré).
Vive sin barreras, así que déjate de historias
y ven, acércate,
que te cuente lo que vamos a hacer.
Saca de tu pecho el rencor
y mira bien hacia dónde se dirigen tus pies.
Enséñame tus alas y grita que la vida es bonita
aunque esté del revés.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.
Vívela, vívela, vívela, vívela.