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En mi casa tengo un gargo, que me encontré en un camino.
Que me encontré en un camino, en mi casa tengo un gargo, que me encontré en un camino.
Con una soga arrastrando y la mira de un amigo.
Le dije pasa de largo, si yo no corro la liebres, dime pa'que quiero un gargo y me dijo no me deje, que me he escapao de un árbol, ay, ay.
A mi sentencia me aferro, hoy que pa' correr no valgo, no quiero flores, ni intierro, se le caigan las dos manos a to aquel que mate un perro.
Me dice quiero barbecho, rastrojo y remolacha.
rastrojo y remolacha, me dice quiero barbecho, rastrojo y remolacha.
Que hace un gargo durmiendo en el sofá de tu casa.
Seguro que no se pierde, de mi no se aparta nunca, viene por la calle siempre.
Con las orejas de puntas, por si se arranca una liebre, ay, ay.
A mi sentencia me aferro, hoy que pa' correr no valgo, no quiero flores ni intierro, se le caigan las dos manos a to aquel que mate un perro.
Compadre si tu lo vieras, jugando con mi chiquillo.
Jugando con mi chiquillo, compadre si tu lo vieras, jugando con mi chiquillo.
Se monta y me lo pasea de la puerta al molinillo, ay, ay.
A mi amigo lo colgaron, sólo por ser un anciano.
A to aquel que cuelgue un gargo, yo le hechaba el mismo hazo
y lo dejaba en un árbol, ay, ay.
A mi sentencia me aferro, hoy que pa' correr no valgo, no quiero flores, ni intierro.
Se le caigan las dos manos a to aquel que mate un perro.
Se enamoró de un garga, en la cancela de un porche.
En la cancela de un porche, se enamoró de una garga, en la cancela de un porche.
Y en la puerta de su casa quedaron aquella noche, ay, ay.
Aquel ratito de fiebre, maldito sea el maldito.
Que por poco se lo pierde, nacieron tres galgos chicos,
pa'que corrieran las liebres, ay, ay.
A mi sentencia me aferro, hoy que pa' correr no valgo, no quiero flores, no intierro, se le caigan las dos manos a to aquel que mate un perro.