Hola, tú a mí no me conoces,
Aunque yo a ti sí,
Como la palma de mi mano.
Y sé que tendrás muchas preguntas,
Y muy pocas certezas.
Así que...
Me pregunto si me oyes todavía,
Si queda algo de ti en mi lejanía.
Yo que soy el fruto de tus fallos y virtudes,
Tus derrotas y victorias, tus aciertos y manías.
La suma de tus noches y reproches de tus días.
La resta de tus gestas, de tus idas y venidas.
Por si me contestas a preguntas con preguntas
Te diré que hay respuestas que no serán respondidas.
Que sepas que la ira caduca pero contamina,
Que no hay camino sino estela de los que caminan,
Sin quitamiedos.
Que te podrás llevar el palo de tu vida
O llegar a donde nadie llegó ni en sus sueños.
No hay imposibles, solo improbables,
Para que cobardes no se atrevan presos por el miedo.
No dejes que nadie te diga que no hagas esto, aquello,
Que no sirves ni que vales, porque vales más que ellos.
¡Eh! No quieras compararte,
Nunca es demasiado tarde para que alguien rectifique.
Que la gente ya no busca espejos donde mirarse,
Solo malos ejemplos que los justifiquen.
Que la línea que más cuides sea la de tu sonrisa,
Y que sea más curva cuanto más la cuides.
Y que todo el que te mire vea
Que la vida se mide en los momentos en los que te sientes vivo
Así que ¡vive!
A mi yo de ayer:
Lo siento si no fui lo que quisiste ser,
Te juro que lo hice lo mejor que supe hacer.
Intenté crecer feliz en este mundo cruel,
Quise cambiar el planeta y llevarlo al papel.
Aunque si hago mala letra para hacer el bien,
Esto sé que no es gran cosa.
Pero has de saber,
Que el día de mañana podrás conocer mi bien.
A mi yo de ayer.
Trata de decir siempre lo que sientes,
Siempre lo que pienses realmente.
No digas todo lo que piensas,
Pero piensa todo lo que dices.
Diferencia entre gente normal y la corriente.
Que los amigos y amores vienen y van,
Pero solo los verdaderos al final se quedan.
Que jamás cambies lo que más ames en vida
Por lo que en el momento deseas.
Se pasa, y la vida es pasajera.
No prometas feliz, no respondas enfadado,
Ni decidas con el día gris.
Perdona rápido, agradece lento.
Quiere de verdad contento
Y nunca dejes que no te vean reír.
Duerme menos y sueña más, sueña despierto,
Con ojos abiertos los sueños se hacen realidad.
Que las mejores cárceles no tienen vallas,
Y los peores ángeles no tienen alas
Pero saben volar.
No des nada por supuesto,
Siempre se está a tiempo para esbozar un 'perdón, lo siento'.
Que perder es otra forma de ganar.
Que en este mundo superficial
Lo que importa está cubierto.
Que no hay dolor ni error que no enriquezca,
Como la piedra con la que tropiezas y repites.
Por eso pide que te quieran cuando menos lo merezcas,
Posiblemente sea cuando más lo necesites.
A mi yo de ayer:
Lo siento si no fui lo que quisiste ser,
Te juro que lo hice lo mejor que supe hacer.
Intenté crecer feliz en este mundo cruel,
Quise cambiar el planeta y llevarlo al papel.
Aunque si hago mala letra para hacer el bien,
Esto sé que no es gran cosa.
Pero has de saber,
Que el día de mañana podrás conocer mi bien.
A mi yo de ayer.
Que quien te quiere también daña.
(Ayer)
Que hay miradas que lo dicen todo
Y ojos que no dicen nada.
(Nada)
Que se coge antes a un cojo,
Ya que un mentiroso también es hombre de palabra.
(De palabra)
Que la apariencia engaña,
Que a veces la mayor sonrisa
Esconde tras de sí una doble cara.
(Que) Que todo lo bueno y lo malo se acaba.
Por eso disfruta como si no hubiera mañana.
Y sí, sé que podría decirte el número premiado de la lotería, o incluso
Decirte cuál de las mujeres será la única que te acompañará el resto de
Tu vida. Pero ni yo mismo lo sé, y si te lo dijese no llegarías a ser yo.
Así que quiere, déjate querer, supera, disfruta, aprende, que todo llega.