Adiós de Mayo (Acústica) - Vanesa Martín

Cuando mis alas no te quemen,

cuando tus gritos no te haga,

cuando el control no venga a verme,

y sí a la duda la invitada.

Cuando mis ojos no te busquen,

cuando tus brazos no sean dagas,

cuando me veas a lo lejos,

y reconozcas que sí estaba.

Cuando no entiendas mi silencio,

y yo sostenga tu mirada,

para saber por qué me alejo,

no me preguntes qué me pasa.

No vengas prometiendo el infinito,

no te vistas de domingo,

que yo no ando con pañuelo.

No escuses el amargo de tu boca,

porque alguna que otra loca,

te la llenará de mal.

Cuando tu instinto me sorprenda,

y yo me meta en mi refugio,

y ni el calor de una caricia,

me comprometa ante tu orgullo.

Cuando este cuerpo de mujer diga volverse a querer,

y me veas avanzar con total tranquilidad,

notes marcas en mi piel,

tu no quieras ocultar que esto ya te lo conté.

No vengas prometiendo el infinito,

no te vistas de domingo,

que yo no ando con pañuelo.

No escuses el amargo de tu boca,

porque alguna que otra loca,

te la llenará de mal.

No vengas prometiendo el infinito,

no te vistas de domingo,

que yo no ando con pañuelo.

No escuses el amargo de tu boca,

porque alguna que otra loca,

te la llenará de mal.